El dióxido de carbono (CO₂) es un gas incoloro, inodoro y no inflamable, indispensable en múltiples industrias: gastronómica, de bebidas, médica, metalúrgica y procesos comerciales en general.
En su forma de grado alimenticio, es seguro para el uso en dispensers, carbonatación, conservación, atmósferas modificadas y equipos de refrigeración.
Propiedades principales
La característica más importante del CO₂ es su capacidad para mantener una presión constante dentro del cilindro gracias a su equilibrio entre fase líquida y gaseosa. Esto garantiza un suministro continuo y estable durante su uso.
Otras propiedades relevantes:
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Es un gas seguro cuando se manipula con ventilación adecuada.
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Actúa como agente bacteriostático, inhibiendo microorganismos en aplicaciones alimentarias.
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Es soluble en agua, lo que permite generar bebidas carbonatadas.
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No es inflamable, y su uso es compatible con equipos de refrigeración, dispensers y sistemas industriales.
¿Cómo se almacena el (CO₂)?
El CO₂ que utilizamos en Clean Ice proviene de procesos industriales controlados, donde es capturado, purificado y comprimido para obtener un producto de máxima pureza y seguridad, apto para consumo y uso profesional.
El gas se almacena en cilindros presurizados, lo que permite transportarlo, manipularlo y recargarlo de manera eficiente, limpia y sin riesgos cuando se siguen las pautas de seguridad adecuadas.